sábado, 20 de diciembre de 2014

Restos humanos calcolíticos, contextos funerarios y diversidad formal (II): los restos humanos del Tumulo de IL.C1 Cótar

De nuevo un post dedicado al registro arqueológico funerario del calcolítico en la Cuenca Media del Arlanzón. Como ya se comentó en una entrada anterior, el tema no son muchos los lugares que proporcionan restos humanos. En este caso, será objeto de comentario el túmulo IL.C1 de Cótar, que, como el Hornazo, ha sido objeto de análisis y publicación en 2013 en la revista RAMPAS (Carmona et alli 2013).


Localización de El Hornazo y el Túmulo IL.C1 de Cótar
El túmulo de IL.C1 de Cótar es uno de los yacimientos intervenidos por Uríbarri y Martínez González en los años 80 con el fin de indagar sobre el poblamiento prehistórico en los alrededores de la ciudad de Burgos. El monumento funerario se encuentra situado en el borde de una lengua de páramo que domina el curso del Arroyo de Cótar. En el momento de la excavación el entorno se hallaba fuertemente alterado por las labores agrícolas, que habían sido las causantes de un fuerte deterioro. La consecuencia fue la eliminación de una buena parte del túmulo en su sector SE y el arrasamiento de la estratigrafía arqueológica en ese sector. La estructura también ha sufrido violaciones en una época histórica previa (hispano-romana). Unas y otras modificaron la secuencia estratigráfica y provocaron la presencia de materiales arqueológicos dispersos en la superficie, que también fueron recogidos por el equipo de excavadores. La información suministrada por ellos sobre el registro quedó recogida en forma de manuscrito, al que nos dio acceso J.M. Martínez González, a quien damos las gracias desde aquí.

El monumento funerario plantea una especial problemática precisamente debido al alto grado de alteración. El túmulo conservaba en el momento de su excavación una forma elipsoide de 8 m. de largo por 5,25 de ancho y una altura de 1,25 m. La aglomeración tumular estaba compuesta por piedras calizas de tamaño variable, pero, en general, de formato reducido. Estas se encontraban cubiertas por una tierra negra de alto contenido orgánico. A pesar de que en la planimetría y secciones proporcionadas por los excavadores no se representan, se observaron durante la excavación varias superficies de alteración, que delimitaban zonas intactas de la estructura tumular (sector B) frente a otras que había sido removidas (sector A, A’ y C). Bajo el túmulo se pudo constatar la presencia de una superficie preparada (limpieza y nivelado del terreno) que se conservaba parcialmente.

Cubierta en parte por el sector intacto del túmulo (sector B), los excavadores identificaron una ordenación intencionada de piedras calizas que conformaban un alineamiento de tendencia ovalada muy afectado en su mitad SE por las alteraciones señaladas. Este alineamiento enmarcaba la boca de una fosa de enterramiento ubicada bajo el túmulo. Esta fosa constituye el elemento central de la construcción. Posee una planta ovalada, con un eje mayor de 1,70 m y uno menor de 1 m. La profundidad oscila entre 1,15 y 1,30 m.



Sección del Túmulo de Cótar publicada por los excavadores (Uribarri Angulo y Martínez González 1987). No se detallan las superficies de alteración aunque se puede apreciar en la parte derecha de la figura el alto grado de afección sufrido por la estructura tumular.

La excavación de la fosa permitió documentar 4 estratos denominados “niveles” que incorporaban materiales cerámicos y humanos. Los estratos superiores acogían restos romanos mientras que los inferiores solo depararon restos exclusivamente prehistóricos. No obstante, todos los materiales arqueológicos documentados mostraban evidencias de haber sido alterados. La consecuencia más evidente fue la dispersión de los materiales por el monumento y la disociación en varios grupos distintos (superficie, masa tumular, fosa de inhumación). El grupo más numeroso de restos lo constituye la cerámica prehistórica (187 fragmentos). Dentro de la misma se reconocen básicamente tres grupos. Un primer conjunto muy numeroso de piezas de aspecto tosco, lisas, con grandes desgrasantes calizos y muy afectadas por procesos químicos (fracturas laminares, desconchones,…) posiblemente causados por la acidez del sustrato geológico. El segundo grupo de piezas de pastas decantadas, superficies bruñidas, decoradas con motivos campaniformes y que presentan una buena conservación. Existe un tercer conjunto con unas condiciones técnicas y de conservación diferentes. Están afectadas parcialmente por procesos postdeposicionales y destacan particularmente por la inclusión en la pasta de desgrasantes cuarcíticos. Todo el conjunto presenta un alto grado de fracturación. Esta circunstancia ha mermado en buena medida el reconocimiento de formas representativas. Buena parte de las piezas no se diferencia en nada por sus atributos técnicos de las recuperadas en ambientes domésticos de la Cuenca Media del Arlanzón, a excepción de los fragmentos con decoración campaniforme. Precisamente, se reconocen 4 fragmentos decorados, tres de ellos con motivos impresos de estilo marítimo internacional y uno con una línea incisa bajo el borde.

Junto a las piezas cerámicas, se recuperó un pequeño conjunto de elementos líticos (NR: 27). Casi todo el conjunto es de naturaleza extractiva y sólo se conoce un caso de pieza pulimentada: un fragmento de hacha o azuela sobre cuarcita. Dentro del conjunto tallado solo se reconocen tres utensilios: dos elementos de hoz y una punta de aletas y pedúnculo.

Datación radiocarbónica [1]

Se tomó una muestra de los restos esqueléticos humanos con el fin de datarlos. El resultado se puede observar en la tabla en la que se incluye también la fecha calibrada a través de Oxcal 4.1, empleado la curva de calibración IntCal 09 (Bronk Ramsey 2009, 2010; Reimer et al. 2009).

ID
Fecha B.P.
Cal BC (2σ)
δ13C
Material
Contexto
Atribución
UGA-8821
3670±25
2137 (95.4%) 1965
-20.7‰
colágeno
Fosa, N. II
Calcolítico Final (Campaniforme)


La datación obtenida entra dentro del rango temporal del Calcolítico Final (Campaniforme) que está establecido en 2500-1900 cal BC para la Meseta Norte. La fecha se asemeja mucho a las obtenidas en los contextos domésticos de la Cuenca Media del Arlanzón, hasta el punto de poder considerarlas contemporáneas. Ambas se ciñen al tramo final del Calcolítico y ponen de manifiesto la simultaneidad de las manifestaciones arqueológicas domésticas y las funerarias.

Restos humanos


Los restos óseos procedentes de este monumento funerario son bastante escasos. Su estado de conservación es, además, deficiente debido a la elevada acidez del suelo. Con los restos óseos recuperados es posible determinar que el N.M.I. es 2, uno adulto y otro infantil. Este número ha podido ser establecido tras el estudio de las piezas dentales. Todas excepto una tienen las raíces cerradas, deduciéndose que son piezas dentales definitivas, que pertenecen a un adulto. Junto a ellas aparece una pieza con la raíz abierta es un canino inferior perteneciente a un individuo infantil. en una de ellas, se aprecia una línea de hipoplasia, lo que indica una carencia nutricional durante la formación del esmalte en esa pieza.

Incisivo lateral superior derecho donde se aprecian una línea de hipoplasia en el esmalte. Imagen: Encarna Valdivielso
Valoración

Respecto a la configuración del depósito con restos humanos cabe señalar que es importante el alcance del saqueo. En primera instancia algunos estratos no parecen afectados. Al menos eso parece atestiguar la presencia exclusiva de materiales prehistóricos en su seno. Sin embargo, la baja cuantía de restos óseos y la presencia esporádica de piezas, todas ellas muy fracturadas, plantean dudas sobre la integridad del depósito. Se asemejan más bien a piezas erráticas que sobrevivieron al saqueo dado su pequeño tamaño. En caso contrario, ¿Dónde están el resto de piezas esqueléticas y las partes ausentes de los recipientes campaniformes? Se podría proponer su desaparición a causa de la acidez del suelo, que ha afectado de manera intensa a ciertas cerámicas y a la industria lítica, pero una parte de las cerámicas no manifiesta este ataque de una manera tan intensa; en especial, los fragmentos campaniformes, en los cuales no se aprecia afección alguna. Por lo tanto, muy probablemente el escueto registro que se conserva es producto de la violación y solamente revela de manera indirecta el estado original del monumento. Este se constituye, como manifiestan sus partes intactas, por una fosa excavada en la que se enterraron al menos dos individuos, acompañados por piezas de cerámica campaniforme del estilo marítimo internacional a modo de ofrenda o ajuar. El enterramiento se monumentaliza con la construcción de un túmulo de piedra y tierra que sella la inhumación. Tal y como determina la datación obtenida, el acontecimiento se produjo a finales del III milenio cal B.C.

Referencias:

Carmona Ballestero, E.; Valdivielso Gutiérrez, E.; Pascual Blanco, S.; Vega y Miguel, J. (2013): "Restos humanos, contextos funerarios y diversidad formal: los yacimientos calcolíticos de El Hornazo y el Túmulo IL.C1 de Cótar (Burgos)", RAMPAS, 15: 53-80.

[1] La datación se llevó a cabo gracias al proyecto Dataciones absolutas de contextos calcolíticos de la Cuenca Media del Arlanzón, financiado por la Fundación Gutiérrez-Manrique. 

domingo, 30 de noviembre de 2014

Descubriendo estructuras arqueológicas al aire libre en Cantabria

Acabamos de concluir una intervención en el Mazo de la Castañera (Obregón, Cantabria). Los resultados de la prospección geofísica de 2013, que presentamos junto a miembros de la empresa GIPSIA S.L. en el Congreso Mundial de la UISPP celebrado este septiembre en Burgos, determinaban la existencia de algunas anomalías con formas geométricas que podrían interpretarse como posibles estructuras arqueológicas en varias localizaciones. Para tratar de corroborar o desechar esta hipótesis se ha llevado a cabo una campaña de excavación durante 2014.



Esta nueva fase de investigación, apoyada a través de la financiación del proyecto Localización de hábitats de la prehistoria reciente al aire libre en el Mazo de la Castañera (Obregón, Villaescusa). Fase 2 del proyecto "Prospección Geofísica para la Localización de Estructuras Arqueológicas" por parte de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Cantabria, ha resultado positiva. La cata planteada sobre el espacio ocupado por una de estas anomalías dio como resultado la identificación de estructuras negativas (zanja, cubeta y hoyo de poste) y depósitos antrópicos que parecen corresponderse con las lecturas detectadas por la prospección geofísica. En los depósitos y los rellenos de las unidades negativas se documentaron cerámicas a torno de pastas grises, lo que pone de manifiesto que la cronología de estas estructuras no es prehistórica sino más reciente. Las dataciones que se están realizando determinarán exactamente la fecha de las evidencias.


El registro arqueológico documentado está siendo sometido a diferentes analíticas en la actualidad. De todas ellas esperamos recibir los resultados a inicios de 2015 para poder ir desentrañando algunas de las incógnitas que actualmente tenemos sobre la mesa en relación al proceso de formación del yacimiento. En este sentido llama poderosamente la atención que las estructuras documentadas se encontraban bajo casi 1 metro de sedimento limoso, rojizo, que incorporaba de manera puntual cerámicas a torno de cronologías modernas y medievales, así como tejas, todo ello con cierto grado de rodamiento. Una conclusión importante del trabajo es que sin la prospección geofísica la detección de estas estructuras habría sido prácticamente imposible. Las estrategias de este tipo se muestran eficientes en entornos donde la observación superficial de restos es altamente improbable, como es el caso de Cantabria, y ayudan a la toma de decisiones en el muestreo. 

De momento este proyecto ha dado un paso en esta dirección. Esperamos seguir dando más en el futuro. 

martes, 25 de noviembre de 2014

Jóvenes investigadores en Arqueología de la Universidad de Burgos presentan sus trabajos en Segovia, gracias a Antequem SL y Banco de Santander

Estos últimos días, del 13 al 16 de noviembre, se han desarrollado las IV jornadas de jóvenes investigadores del Valle del Duero en Segovia. El encuentro, organizado por Zamora Protohistórica, ha integrado un buen número de sesiones en las que los participantes han podido dar cuenta de los últimas aportaciones sobre el registro arqueológico del Valle del Duero. Entre ellos, se han presentado los trabajos que se han derivado del convenio establecido entre la empresa ANTEQUEM, Arqueología y Medio Ambiente S.L. y el Área de Arqueología de la Universidad de Burgos, bajo la coordinación del Servicio de Empleo Universitario de esa misma instituciónpara la realización de las prácticas voluntarias y obligatorias del Grado de Historia y Patrimonio. Además, el trabajo iniciado mediante esta colaboración se ha visto respaldado por el apoyo del programa de becas del de prácticas en PYMES del Banco de Santander. Gracias a él, tres alumnos han disfrutado de una beca para continuar con su formación como futuros arqueólogos. El trabajo ha culminado con la presentación en esta reunión científica de los resultados. 

En las jornadas, un equipo formado por Alberto Berzosa, Mónica Gorostiza, Gonzalo de Pedro, Luis Villanueva, Maria Eugenia Delgado, Miguel Angel Arnaiz y Eduardo Carmona presentó varios trabajos con las siguientes temáticas:

  • Cerámica, silos y estructuras de combustión: El registro arqueológico de la Prehistoria reciente de Cuesta Vega (Cavia, Burgos)
  • Los Secadales: uso y amortización de un área de producción tardorromana.
  • Pequeños yacimientos con hoyos de la Antigüedad Tardía: el caso de Las Cordoneras
  • Mamblas II: una comunidad rural de la Plena Edad Media en la Moraña (Ávila)






La experiencia ha resultado notablemente positiva. Los jóvenes investigadores del equipo cumplieron con creces con las expectativas y defendieron sus trabajos de manera ejemplar. De este modo, dan un paso más en el camino que han decidido seguir. La presentación de los resultados del trabajo y el sometimiento a crítica en un ámbito de este tipo da cuenta del compromiso y buen hacer ¡Felicidades a todos!

domingo, 9 de noviembre de 2014

Nueva campaña de excavación en el Abrigo de la Castañera (Obregón, Cantabria)

Como viene siendo habitual, a finales del mes de octubre se ha llevado a cabo una nueva campaña de excavación, la cuarta bajo la dirección de Cristina Vega Maeso, en el Abrigo de la Castañera, que ha sido financiada por la Consejería de Cultura del Gobierno de Cantabria. En ella ha tomado parte un equipo compuesto por jóvenes arqueólogos de la Universidad de Burgos y Universidad de Cantabria.

Excavando en el Abrigo de la Castañera (2014)
Esta nueva fase viene a consolidar los avances realizados en las tres campañas anteriores. En ellas, el equipo de investigación dirigió sus esfuerzos a valorar el estado de conservación de la estratigrafía en distintos puntos de la cavidad y a determinar los espacios en los que se había perdido por causas diversas, desde excavaciones a mediados del siglo XX hasta daños causado por los furtivos. Los prometedores resultados de años anteriores han sido ampliados en esta ocasión en la que se ha tenido la oportunidad de excavar depósitos de la Edad del Bronce y del Calcolítico. Tras la finalización de los trabajos de campo, se ha puesto en marcha la fase de análisis en la que colaboran distintos especialistas. Los datos que se obtengan servirán para ampliar el parco conocimiento que se tiene de estas etapas en la región cantábrica.

Precisamente, el proyecto de investigación ya está avanzando los primeros resultados a través de la presentación de los mismos en el congreso mundial de la UISPP celebrado en Burgos y, más recientemente, con la defensa del primer TFM centrado en el registro faunístico recuperado en el abrigo. En efecto, este mismo mes de octubre Alejandro Sierra Sainz-Aja, bajo la dirección de la Dra. Ana Belén Marín del IIIPC, defendió con brillantez el trabajo Subsistencia y modos de vida durante la Prehistoria Reciente en Cantabria. Los restos arqueofaunísticos y antropológicos del Abrigo de la Castañera. ¡Enhorabuena!



Desde estas líneas, la dirección del proyecto quiere dar las gracias tanto a los participantes de la campaña como a los anfitriones, pues en todo momento han sido un ejemplo de compromiso, esfuerzo, eficacia y compañerismo.

martes, 14 de octubre de 2014

Restos humanos calcolíticos, contextos funerarios y diversidad formal (I): los restos humanos de El Hornazo

Como ya he señalado en varias ocasiones, en la actualidad existe una amplia base documental sobre el registro arqueológico calcolítico de la Cuenca Media del Arlanzón. En ella se observa un escenario complejo donde se reconocen yacimientos de distinta naturaleza que proporcionan abundante información. A pesar de ello, los datos sobre los contextos funerarios siguen siendo escasos. En particular los que hacen referencia a los restos humanos documentados en ellos. Con esta entrada inicio una serie dedicada a presentar los resultados obtenidos de dos estudios sobre contextos funerarios que han sido publicados en 2013 en la revista RAMPAS. Los datos, cuya referencia bibliográfica dejamos a continuación (Carmona et alli 2013), proceden de dos yacimientos conocidos del valle del Arlanzón: El Hornazo y el túmulo IL.C1 de Cótar. La entrada de hoy se centra en el primero.


Localización de El Hornazo y el Túmulo IL.C1 de Cótar
El Hornazo es un yacimiento excavado en 2004. Se ubica en las cercanías del barrio de Villimar (Burgos), en un espacio llano en la zona de contacto entre las terrazas del río Vena y las cuestas del páramo. Está conformado por un conglomerado de hoyos de todo tipo (180) entre los que se reconocen estructuras siliformes, hoyos de poste y grandes fosas. El yacimiento sólo tiene una fase de formación y todas las evidencias se datan radiocabónicamente dentro del Calcolítico Pleno (2950-2575 cal BC). El yacimiento, excavado parcialmente, tiene una extensión de unas 4 ha. La distribución de las evidencias manifiesta una ordenación orgánica del espacio en la que se reconoce un área de vivienda/residencia, un área de almacenamiento de productos y una tercera área de transformación de bienes de consumo y almacenamiento. Dentro del conglomerado de evidencias se documentan dos enterramientos en fosa, ubicados en la zona de mayor concentración de estructuras (Áreas 7 y 8) dedicada al almacenaje de productos subsistenciales. Ambos se han realizado en dos hoyos cuya morfología no difiere del resto de estructuras siliformes excepto por su contenido.

Localización de las evidencias funerarias de El Hornazo
Fondo 103

En esta estructura se documentaron los restos de un individuo. Junto a él se halló un cuenco en posición primaria. El depósito que recubre al individuo no se diferencia de otros que colmatan otros hoyos del mismo yacimiento. Incorpora cerámica fragmentada, unos pocos restos faunísticos y escasos elementos de industria lítica. Estos materiales se encontraron como elementos erráticos dentro del estrato; es decir, su depósito final no es premeditado como sucede con el cuenco completo. Por esta razón es difícil relacionar su presencia como ajuar u ofrenda. Los datos de los que se dispone no permiten discernir si tales piezas se han incorporado como una parte más del relleno o su presencia se puede relacionar con otro tipo de práctica ceremonial. El conjunto cerámico presenta las formas y decoraciones características del Calcolítico Pleno: cuencos hemiesféricos, ollas y cazuelas globulares, cazuelas cerradas y rectas, con fondos planos. Estas piezas están decoradas con pastillas repujadas, líneas incisas horizontales bajo el borde y perforaciones. El repertorio decorativo lo completa un pequeño fragmento decorado con un motivo formado por una línea incisa y dos bandas de puntos impresos.

Registro arqueológico del Fondo 103 de El Hornazo

Fondo 140

El segundo enterramiento contenía los restos de otro individuo depositado sobre su lado derecho con los brazos formando un escorzo al quedar ambas muñecas sobre el lado izquierdo de la cadera. El contenedor de la inhumación es un hoyo colmatado por tres unidades estratigráficas. Los restos esqueléticos se encontraban cubiertos por una unidad compuesta por material heterogéneo que han sepultado al enterrado en un proceso aparentemente rápido. Las unidades inferiores parecen estar formadas por residuos domésticos que se mezclan con material procedente de las paredes del hoyo, fruto de desprendimientos mientras el mismo estaba vacío. En la unidad inferior apareció una cuenta bicónica de cerámica que, a pesar de su ubicación, parece parte del ajuar del inhumado. Este tipo de piezas son habituales en contextos campaniformes, aunque suelen estar fabricadas con otros materiales como hueso o marfil. Esta disociación estratigráfica es difícil de explicar pero resulta significativo que en el mismo contexto funerario aparezca el único elemento de adorno personal identificado en el yacimiento.

El proceso de formación del contexto no es continuo, puesto que se reconoce un hiato entre la excavación de la estructura y su uso como fosa de inhumación. El contendor, por tanto, no fue construido ex profeso para albergar el enterramiento, sino que se aprovechó una fosa preexistente. La morfología de la misma y su capacidad (1131 l.) parecen ser indicativas de su uso original como silo. Dentro de este contexto no existe ninguna evidencia de elementos de ajuar u ofrenda. Los únicos materiales documentados son fragmentos de cerámica, industria lítica y un elemento de molienda. Su presencia se relaciona con la incorporación dentro de material de relleno de la estructura. Así lo atestigua el alto estado de fragmentación de la mayoría de las piezas. El conjunto de cerámica también presenta los atributos propios de las piezas con atribución del Calcolítico Pleno del oriente de la Meseta Norte. En concreto se identifican formas simples, cuencos en su mayoría, lisos y, en algún caso, decoradas con pastillas repujadas, líneas incisas simples bajo el borde y bordes con moldura.

Registro arqueológico del Fondo 140 de El Hornazo
Dataciones radiocarbónicas

Se tomaron dos muestras de hueso para datar[1] los enterramientos. Ambas se enviaron al Center for Applied Isotope Studies (CAIS) de la Universidad de Georgia (USA)Ambas fechas (UGA-6838 y UGA-6995), que se solapan levemente en su calibración a 2σ, se sitúan en un momento avanzado de la ocupación del emplazamiento tal y como se desprende del rango de fechas disponibles para El Hornazo.

ID
Fecha B.P.
Cal BC (2σ)
δ13C
Material
Contexto
Atribución
UGA-7566
4290±25
2927 (95.4%) 2878
-20.4‰
Hueso fauna
F94, UE 958
Calcolítico Pleno (Precampaniforme)
UGA-8820
4200±25
2893 (27.5%) 2850
2814 (52.9%) 2741
2729 (14.4%) 2694
2685 (0.7%) 2680
-21.8‰
Semilla (Tritucum aestivium/durum)
F30; UE 303
Calcolítico Pleno (Precampaniforme)
UGA-6838
4010±25
2576 (95.4%) 2473
-19.4‰
Hueso humano
F103; UE 1031
Calcolítico Pleno (Precampaniforme)
UGA-6995
4100±25
2860 (22.1%) 2809
2752 (8.0%) 2721
2702 (65.3%) 2574
-19.4‰
Hueso humano
F140; UE 1401
Calcolítico Pleno (Precampaniforme)

Conjunto de dataciones radiocarbónicas disponibles de El Hornazo

Valoración

Cabe recordar que la presencia de inhumaciones dentro de los espacios de hábitat durante el III milenio cal B.C. todavía continua siendo un tema controvertido. El problema estriba en explicar las inhumaciones en fosa dentro de lugares con una vocación doméstico-productiva. Las fechas descartan, en este caso, una hipótesis que consideraría a los inhumados como una especie de “ofrendas fundacionales” puesto que las dataciones proporcionadas por los contextos domésticos son más antiguas que las de las inhumaciones. No se debe olvidar que, además, la utilización como tumba de antiguos silos amortizados, en ámbitos supuestamente domésticos, supondría la exclusión de estos inhumados de otras formas estandarizadas (cuevas funerarias y/o megalitos) aún vigentes, como demuestra el registro arqueológico local, que hasta ese momento habían supuesto la expresión sistematizada de gestión de la muerte. Su presencia en el yacimiento plantea como causa su asociación a cuestiones de orden ceremonial o simbólico, que atienden a la utilización ideológica de la muerte en beneficio de la reproducción social de la comunidad.

Referencias:

Carmona Ballestero, E.; Valdivielso Gutiérrez, E.; Pascual Blanco, S.; Vega y Miguel, J. (2013): "Restos humanos, contextos funerarios y diversidad formal: los yacimientos calcolíticos de El Hornazo y el Túmulo IL.C1 de Cótar (Burgos)", RAMPAS, 15: 53-80.


[1] Las dataciones se llevaron a cabo gracias al proyecto Dataciones absolutas de contextos calcolíticos de la Cuenca Media del Arlanzón, financiado por la Fundación Gutiérrez-Manrique. 

miércoles, 24 de septiembre de 2014

Un nuevo TFG estudia las fíbulas de Clunia

Es un placer para mi poder dedicar unas líneas a la defensa de un nuevo TFG a cargo de una estudiante del Grado de Historia y Patrimonio de la Universidad de Burgos. En esta ocasión ha sido Mónica Gorostiza González quien ha presentado su trabajo titulado "Estudio de un conjunto de fíbulas procedentes del yacimiento de Colonia Clvnia Svlpicia". ¡Felicidades Mónica! 

En él se recopilan las fíbulas procedentes del yacimiento arqueológico de Clunia (Burgos) que se encuentran tanto en los almacenes del mismo como en el Museo de Burgos. Además de llevar a cabo un excelente estudio tipológico de las piezas, la investigadora va más allá y utiliza la información recuperada para contrastar hipótesis sobre la ubicación de la ciudad indígena (arévaca) de Clounioq y la romanización materializada en el yacimiento. Para ello se vale de la distribución espacial de las piezas, con la que demuestra que con toda probabilidad la ciudad indígena no se ubicó nunca en el mismo solar que ocupa la romana.




El estudio espacial no se ciñe exclusivamente al yacimiento sino que se extiende al ámbito de la Meseta Norte donde se analiza la presencia de fíbulas como las encontradas en Clunia. En este sentido, las piezas dan cuenta de la intensa relación con la zona nororiental de la Meseta Norte frente a la zona sur, lo que determina el alcance del área de captación de la ciudad. 

Por último, el análisis sobre la romanización a través de estos peculiares materiales se centra en las fíbulas tipo La Tene cuya pervivencia en el uso se relaciona con una aculturación lenta, irregular, donde las poblaciones indígenas asumen parte de la cultura romana pero mantienen algunos rasgos que se reflejan en el registro arqueológico.

En definitiva, un buen trabajo que se merece el mejor de nuestros comentarios y esperamos que tenga continuidad en el futuro. ¡Ánimo con ello!

lunes, 22 de septiembre de 2014

Crónica del XVII World UISPP Congress celebrado en Burgos

Hola de nuevo. A más de un mes después de mi última entrada vuelvo a retomar mis obligaciones con este blog. En este tiempo me han tenido retenido mis nuevas obligaciones laborales así como la preparación de varias contribuciones que tenía previsto presentar al XVII World UISPP Congress que se ha celebrado en mi ciudad. Un evento como este no se tiene todos los días a las puertas de tu casa y es una suerte haber podido disfrutar de él durante una semana.




Mi valoración sobre el congreso es muy positiva, la cual parece coincidir con la opinión de la inmensa mayoría de los colegas con los que he hablado. Desde mi punto de vista, el encuentro ha sido un éxito en todos los sentidos y lo primero que debo hacer es felicitar a los organizadores, sobre todo porque la dimensión del congreso ha sido tremenda y que todo discurriera en tan buenos términos es fruto del trabajo bien hecho. Dentro del buen hacer quiero destacar la labor de los "voluntarios" que ha sido perfecta. Como participante, mi experiencia de estos días da cuenta de sesiones con gran participación, contribuciones de calidad contrastada, encuentros con colegas de multitud de lugares distintos y un ambiente excelente que se trasladó a la ciudad en forma de congresistas disfrutando del Burgos más gastronómico y lúdico. Muchos de mis convecinos también se han sentido satisfechos con las visitas recibidas y con el buen ambiente que ha disfrutado la ciudad estos días.

El encuentro deja poso en muchos sentidos, pues, entre otras cosas aporta sendos volúmenes que actualizan el estado de la cuestión sobre la Prehistoria en la Península Ibérica. A esta contribución pre-congresual se le sumarán la multitud de publicaciones sectoriales que serán consecuencia de este encuentro. La mayor parte de ellas verán la luz en acreditadas publicaciones internacionales próximamente y servirán para profundizar en cada una de las múltiples líneas de investigación que fueron tratadas. Para hacerse una idea, se dieron cita hasta 30 sesiones temáticas por día en las que participaron investigadores de todo el mundo, incluyendo alguno de los más destacados investigadores a nivel internacional. Esperamos con ansiedad poder aprovechar el abundante fruto del encuentro y dar cuenta del mismo desde este blog. No me queda más que decir que espero que todos los participantes estuviesen a gusto en Burgos que demostró que a veces los tópicos son traicioneros, con unos 30ºC de máximas toda la semana, definitivamente Burgos was not cold!

domingo, 3 de agosto de 2014

Análisis químicos de cerámica calcolítica

Hola a todos. Después de unos días de vacaciones volvemos a la carga. Tal y como reza el título de esta entrada, arrancamos con novedades relacionadas con una de las líneas de investigación sobre la que estamos trabajando en la actualidad: los análisis químicos en cerámicas. Esta apuesta interdisciplinar arrancó ya hace unos años a través de la colaboración entre las Áreas de Arqueología y Química Analítica de la Universidad de Burgos. Varios son ya los trabajos compartidos, los cuales no habrían sido posibles sin la disposición, entusiasmo y buen hacer de la Dra Susana Palmero, a quien varias camadas de arqueólogos van a estar eternamente agradecidos.

La colaboración de la que acabamos de hablar no se ciñe exclusivamente a la cerámica, ni, dentro de ella, se circunscribe a una única metodología y propósito. No obstante, de momento el análisis de pastas es la línea que ha deparado ya resultados que permiten ser publicados en revistas científicas. Este el caso de un artículo que aparece en el Boletín de la Sociedad Española de la Cerámica y el Vidrio  donde se presenta un estudio realizado sobre las cerámicas calcolíticas de la Cuenca Media del Arlanzón. Dentro de los conjuntos cerámicos de este tipo se reconocen similitudes y diferencias que plantean un problema arqueológico que la tipología no ha podido solucionar. Durante el Calcolítico, desde el punto de vista morfotipológico, se reconocen dos conjuntos que se suceden en el tiempo: precampaniforme y campaniforme. Cada uno tiene unos elementos formales definidos y particulares, que se podrán considerar propios de la Cuenca Media del Arlanzón. No obstante, dentro de los yacimientos aparecen piezas con atributos raros en este marco geográfico y que hace plantearse preguntas como ¿realmente son extrañas estas piezas? ¿se han fabricado aquí o proceden de otros lugares? 


Cerámicas representativas de los conjuntos tipológicos del Calcolítico en la Cuenca Media del Arlanzón. Escala gráfica, 10 cm
El análisis químico de pastas tiene capacidades que amplían el alcance de los estudios tecno-tipológicos. Para ello existen distintas técnicas que permiten la reducción a lenguaje estadístico de la composición química de las pastas, lo que posibilita una comparación menos subjetiva en la que entran en juego elementos imperceptibles a través de un análisis macroscópico. Esta comparación permite, más que reconocer el origen de las pastas, identificar grupos con unas características químicas semejantes, que conforman familias dentro de espacios o entornos geológicos determinados. En algunos casos también se reconocen elementos extraños dentro de un escenario concreto cuya composición química se aproximaría más a la de otros lugares. En este sentido, el fin del análisis ha sido dilucidar las características químicas de las cerámicas calcolíticas de la Cuenca Media del Arlanzón, comprobar su similitud o discordancia y contrastar esta información con la procedente de los estudios tipológicos y decorativos. Por esta razón se han muestreado un conjunto de piezas calcolíticas provenientes de distintos yacimientos.


Gráfico representativo del Análisis de Componentes Principales realizado a las muestras

Los resultados muestran aspectos interesantes que han permitido discutir sobre la posible procedencia y los intercambios de las cerámicas calcolíticas en este sector de la Meseta Norte. Estos datos muestran una procedencia mayoritariamente local de las cerámicas junto a elementos intercambiados o ajenos a la Cuenca del Arlanzón, tanto en relación con los conjuntos Precampaniformes como Camopaniformes. En términos arqueológicos, el patrón se puede relacionar con un modelo doméstico de producción en el que se aprovechan de manera mayoritaria los recursos locales pero que integra elementos foráneos de manera puntual. Como dato curioso cabe señalar la presencia de algunas piezas de campaniforrme internacional cuya procedencia parece foránea, y cerámicas decoradas con motivos propios del valle del Ebro cuya fabricación es local... Ambas situaciones abren sugerentes preguntas que esperamos resolver en el futuro.

domingo, 13 de julio de 2014

Primeros TFG defendidos en el Grado de Historia y Patrimonio de la Universidad de Burgos

Esta semana han sido defendidos los primeros Trabajos de Fin de Grado (TFG) de la primera promoción del Grado de Historia y Patrimonio de la Universidad de Burgos. Para quien no lo sepa, la adecuación de las titulaciones universitarias al espacio de educación superior europeo (o Plan Bolonia, como se conoce generalmente) contempla que todos los estudiantes deben presentar un trabajo de investigación al final de sus años de formación para alcanzar su graduación. A través de estos trabajos se tiene que demostrar que los graduados están capacitados para llevar a cabo la labor para la que han sido formados. Es una prueba exigente, que requiere madurez y autoexigencia, por lo que su conclusión es digna de ser valorada. Por eso desde aquí quiero felicitar a todos y cada uno de los alumnos que han logrado superar esta dura prueba: FELICIDADES

En relación con este asunto, quiero hacer una mención especial a los tres trabajos que se han defendido dentro de las líneas de investigación ofertadas por el Área de Arqueología de la Universidad de Burgos. Al tocarme más de cerca, la sensación de orgullo es todavía mayor. Los tres han culminado un esfuerzo que comenzó mucho antes de que se lo exigiera el plan académico, lo que demuestra su compromiso, ganas de aprender y capacidad de trabajo. Estos recién graduados han presentado tres interesantes temas que han desarrollado de manera eficiente, aportando novedades que inauguran nuevas líneas de investigación de las que nos beneficiaremos el resto de los investigadores. Todos tienen en común el estudio de fenómenos arqueológicos vinculados al megalitismo, ya sea de aquellos que se dan en un dolmen en concreto (Arroyal I) o de carácter general, en la Cuenca del Duero.

Monumento megalítico en proceso de excavación: Dolmen de Arroyal I (Alfoz de Quintanadueñas, Burgos)


Eduardo Arancón Torrecilla presentó el trabajo "Estudio de la fauna en el dolmen de Arroyal I" que analiza este tipo de evidencias, algo que resulta una novedad dentro de un dolmen de la Meseta Norte, en relación a los distintos contextos de aparición identificados en este monumento funerario. Hay determinadas evidencias que señalan que la representación faunística en este yacimiento no es azarosa y hay que relacionarla con el ceremonial funerario que pudieron practicar las comunidades neolíticas y calcolíticas que se enterraron allí. Así, por ejemplo, lo señala la desigual distribución por estratos, las frecuencias y porcentajes de las especies representadas que difieren de los lugares domésticos y la presencia diferenciada de regiones anatómicas de aprovechamiento no cárnico.




Alberto Berzosa Ordaz por su parte defendió el trabajo "Los objetos metálicos dentro de los contextos funerarios: el yacimiento calcolítico de Arroyal I". En este yacimiento se recuperaron diferentes objetos metálicos que proceden de distintos estratos. En este caso, la investigación se dirigió a los objetos prehistóricos que fueron encontrados en contextos calcolíticos en posición secundaria y desvinculados de los dos únicos individuos encontrados en conexión anatómica. Por esta razón, es prácticamente imposible dilucidar si su incorporación se hace como ofrenda o como ajuar. El trabajo aporta un riguroso estudio multidisciplinar pues el autor colaboró con la Dra. Susana Palmero del Área de Química Analítica de la Universidad de Burgos en el análisis de la composición de las piezas. Todos los objetos son de cobre casi puro, a excepción de un curioso aro que contiene una importante cantidad de plomo como impureza. La posición secundaria de todos ellos y la baja frecuencia limitan las inferencias que se pueden realizar desde un punto de vista social. Estos objetos metálicos deben relacionare además con el intercambio de materias primas y objetos acabados porque en la zona no hay afloramientos de mineral de cobre.



Natalia García Redondo leyó el trabajo titulado "Elementos rituales y desigualdades sociales en los monumentos megalíticos de la cuenca del Duero". La autora lleva a cabo un análisis de algunas manifestaciones funerarias megalíticas del Neolítico localizadas en la cuenca del Duero. Este análisis tiene como objetivo contrastar las hipótesis que defienden la existencia de desigualdades entre los individuos de estas comunidades. En el trabajo se presentan las distintas alternativas teóricas e interpretativas al respecto para luego discutir los datos procedentes de los monumentos funerarios. En este sentido, los datos procedentes estos contextos (número de individuos, disposición de los restos esqueléticos, objetos incorporados dentro del ceremonial, análisis antropológicos) parecen indicar que en estos lugares no se enterró a todos los miembros de la comunidad ni todos los enterrados recibían la misma consideración. Estas distinciones aluden a las diferencias de estatus de los individuos dentro de las comunidades, relacionadas con el parentesco, con un preferencia en la representación de los adultos masculinos.




Espero que todos estos temas tengan continuidad en un futuro cercano y sean el comienzo de una prometedora vida investigadora. ¡Ánimo!